El Poeta
Sabes, pensaba ahora mismo en la fugacidad
Del tiempo... Nada nuevo, ya ves.
Pero de qué podría hablar a veces sino
Del paso del tiempo, del amor y de la muerte.
Ahora comprendo que te amo y mi amor
Es como un haiku, tan simple y sencillo.
Qué dulce este conversar nuestro, aquí,
Sentados en el parque al igual otras gentes
Que pasean, y los niños que hacen volar sus cometas.
Sabes, en este río nuestro de palabras fluyen
Besos y abrazos, no podía ser de otra manera
Esta tarde clara de abril junto al pequeño lago.
Somos porque somos y de vivir morimos y nacemos;
Vayamos hasta el puesto de helados y comámonos uno.

Francisco Aranda Cadenas

Málaga, a 17 de abril de 2011

2 comentarios:

  1. ja que lindo ese final! Todo el poema subraya una sencillez inmensa, porque asi es el amor cuando se ama bien y a fondo: sencillo, simple, cristalino.
    Un gusto visitarte.

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  2. Pues sí...tan sencillo y puro...
    Gracias Poeta

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