FIEBRE/
Qué sería cierta espera sino un colibrí ardido/
Por entre las flores y el verde tallo, qué oficio fuera/
Decírselo al frío y a la noche, viendo al silencio/
Amanecerse en una urdimbre de soledades juntas/
Junto a un fuego necesario./
Dime, amor, tú que lo sabes , si es que lo sabes,/
Como digerir sombras cuando a veces unas cuencas/
Vacías de los ojos se hacen eco en el mar/
Y la fiebre derrota los cuerpos y devora las frentes/
Como si de un sueño pariendo calima se tratare./
Francisco Aranda Cadenas/
Málaga, en diciembre de 2011
Díficil, my difícil amar cuando las cuancas de lso ojos están ausentes y sólo el recuerdo rememora las caricias, los abrazos, los besos y las noches de pasión con el ser amado.
ResponderEliminarMi última publi,
http://annagenoves2012.blogspot.com.es/2012/04/tiempos-convulsos-donde-se-rompe-hasta.html